Pola de Gordon La magdalena Camino Olvidado

Peregrino en el Camino Olvidado,
con la montaña por testigo a su lado.
Por sendas y senderos, avanza con fe,
bajo la mirada de gigantes que lo protegen como un buey.

Altos montes, como guardianes del planeta,
velan los pastos donde el ganado pasta en sus tierras.
Valles profundos, tajos de espada en la inmensidad,
el peregrino avanza, guiado por su voluntad.

Fuentes de agua fresca, arroyos que cantan,
melodías que acompañan, como notas que encantan.
Desfiladeros rocosos, con farallones de piedra,
testigos imponentes, en la cabeza del viajero se ciernen.

En el sendero rocoso, abrupto y desafiante,
el peregrino salta, en danza constante.
Piruetas en el aire, para no caerse,
un ballet entre montañas, un arte de valerse.

Así la naturaleza, en su danza eterna,
entre altos y bajos, una sinfonía tierna.
Montes, valles, fuentes, desfiladeros,
pintando el cuadro del mundo, con sus colores sinceros.

Santiago aguarda al final del camino,
con sus promesas y destellos divinos.
Peregrino, entre altos y bajos, sigue adelante,
en el Camino Olvidado, con su voluntad y aguante.

Pola de Gordon La Magdalena

Día 2 de Octubre de 2023 16ª etapa de este Camino Olvidado.

Hoy el camino ha sido duro porque había que subir hasta 1770 metros según mi GPS, pero aún así he salido casi amaneciendo porque eran menos km. Han sido hasta el albergue 25,300 km pero con una buena subida.

Nada más salir voy por las calles hacia la subida que empezaba casi enseguida de Pola.

Al de un rato de ir cuesta arriba llegó a los Barrios de Gordon, atravieso el pueblo y sigo subiendo. La ventaja es que es una pista de tractores y aunque tengo que parar cada dos por tres para coger Oxígeno el camino es llevadero. 

Cuando estaba ya bastante cerca de la primera cumbre me encuentro con una manada de caballos y en concreto un macho muy grande una yegua y dos potrillos en medio del camino. Pensé que se apartarían como suelen hacer, pero no, el macho se atravesó delante mío mirándome fijamente y diciéndome pasa si te atreves, pero con las patas traseras preparadas.

Yo le hice señas de que pasarán para abajo, pero nada.

Al final doy marcha atrás a ver si bajaban detrás mio y se iban por la campa pero nada el macho me miraba fijamente y no se movía.

Así que opté por dar un rodeo meterme por los matojos y salir por detrás para continuar hacia arriba.

Ya comenzando la bajada de la primera cumbre oigo el ruido de un coche. Milagro un vehículo por allí, no los suelo ver ni por la carretera, menos en el monte. Pues media hora más tarde otro vehículo.

Al bajar más abajo y antes de empezar la subida más alta me encontré. Una fuente con agua muy fresquita y aproveché para beber y llenar la cantimplora.

Casualidad cuando empiezo la subida veo un cartel y un desvío que marca a la fuente de la salud. Pues no, ya había bebido agua y no me desvíe.

Fui subiendo y subiendo hasta llegar a los 1776 metros recorridos 11,400km.

A partir de hay ya todo fue bajar por una pista también bastante cómoda aunque con cuidado por las piedrillas pequeñas que se resbala uno con ellas. Tras unos amagos de caída, una caida y cuantos km de bajada el camino se convierte en sendero y va bordeando un arroyo hasta que se mete en un desfiladero muy cerrado y con muchos pedruscos. Se llama: El Desfiladero de los Calderones. En realidad, el desfiladero de los Calderones, es un estrechísimo pasillo natural de la comarca de Luna, es un espectáculo geológico trabajado a conciencia por el río Luengo o arroyo Calderones, según los tramos y los mapas. Tanto, que está considerado Punto de Interés Geológico. Los geólogos explican que este pasillo es fruto de la acción erosiva del arroyo sobre unas calizas que fueron formándose hace 360 millones de años, cuando todo esto no era otra cosa que el fondo de un mar al que iban a parar los caparazones de los animales muertos. 

Yo voy bajando y saltando de pedrusco en pedrusco y en otros con cuidado que uno ya no tiene edad por el susodicho desfiladero, que parece sacado de una película del Oeste.

Al cabo de un rato veo dos senderistas que suben hacia arriba dando un paseo y unos minutos después un corredor joven que va saltando por los pedruscos también hacia arriba.

Saliendo ya del desfiladero hay una pareja haciendo escalada. La verdad es que el sitio es aparente, se puede ver en las fotos.

Yo sigo para abajo buscando un bar para tomar una 1906 fresquita y descansar un poco que no he parado en todo el camino y son más de las 12.

Al de un rato entro en un pueblo Piedrasecha y hay un bar con pinta de cerrado con dos hombres fuera. Les pregunto que si está abierto y me dicen que no, pero que si tocó el timbre igual me venden una cerveza.

Tocó el timbre sale una señora y le pregunto a ver si habría la posibilidad de tomar algo que vengo de pola. Baja la señora y nos atiende a mi y a uno de los otros que estaban esperando.

Tomo la cerveza hago unas llamadas y sigo para abajo con ganas de llegar.

Al de unos km entro en otro pueblo. Vinayo y veo un bar con gente son las 14 horas y pienso en comer algo. Llamo al albergue y le digo si hay posibilidades de comer en La Magdalena me dicen que no, que está cerrado por descanso. Así llevo todo el camino me coinciden los bares cerrados. El caso es que entro y como. Una ensaladilla rusa, y una chuleta de gorrino con patatas y flan de café, y si. Si os lo estáis preguntando si, con una 1906, la Estrella del Camino, al menos del mio.

Salgo del bar y a buscar el albergue a todo tren ya con el estómago lleno después de estar toda la mañana con una café y tres rosquillas.

Al fin llegó al albergue y me atiende el Hospitalero Dulio creo que se llama muy amable me atiende me sella me da la llave  y me repite que si necesito algo no dude en llamarlo, y se va.

Yo saco la ropa, que ayer no lave,  el saco, me quito camiseta y calcetines y lavo todo. Seguido lo tiendo en la calle y me ducho. Tras la ducha lavo la ropa que me he quitado y la tiendo también.

Son ya las 5:30 y Dulio me ha dicho que hay una tienda, así que bajo a comprar fruta, pan, y algo para desayunar.

Vuelvo al albergue, dejo todo y me salgo a dar un paseo por el río. Encuentro un banco y me quedo a la sombra viendo un señor intentando pescar algo en el las aguas.

Aprovecho para llamar por tlf a un pueblo a ver si está abierto el albergue para el día 4 para dormir. No me cogen, mañana tendré que llamar otra vez. Con las mismas continuo mi paseo después de hablar con Bego mi mujer y camino del albergue.

Según llegó ya está seca la ropa. La recojo la doblo y la que no me voy a poner mañana la guardo, la otra la dejo fuera.

Ahora a punto de cenar estoy escribiendo la crónica, y la terminaré mas tarde según termine la cena, antes de acostar. Como casi todo el camino duermo solo.

Galería Fotográfica de la Etapa, espero que os gusten las fotos son todas de móvil.