Güeñes Nava de Ordunte

Gueñes – Nava de Ordunte

2ª etapa de este Camino Olvidado, día 18 de septiembre de 2023. 24,86km.

Esta mañana me despierto pronto pero no me quería levantar tan temprano, al final el cuerpo me dijo que para arriba que había que ir al servicio, así que me levanté, y otra vez al catre a dormir.

A las 6 me vibra el móvil, así que arriba, cogí los bártulos y haciendo el menor ruido posible me fui a la cocina a desayunar y a arreglar la mochila.

Un poquito de jamón, otro poco de queso y un barrita energética con los polvos proteínicos y agua.
Recogí los utensilios del desayuno los fregué, limpié la mesa y a la calle, a coger el tren para Güeñes.

Llego a la estación y a coger billete. El día anterior se me olvidó sacarlo de ida y vuelta así que a pagar 2,45€ otra vez por tres estaciones y un apeadero. Busco la parada de Gueñes y no aparece en la máquina, le pregunto a otro viajero y tampoco la encuentra, al final me dice que saque para Aranguren que es la anterior.
Meto el dinero y no lo coge, lo vuelvo a meter y tampoco. En eso llega el tren, rápido le meto 5 euros en billete y tampoco los quiere, los vuelvo a meter otra vez pero el tren se va. Esta vez sí lo coge pero ya sin tren y en la estación me quedo mirando como se va.

Espero al siguiente que es las 7:00h mientras doy los buenos días por las redes sociales. Me monto en él, y llego a Aranguren y para mi sorpresa no para, así que a Gueñes. Salgo del tren y la barrera no me abre, repito y nada.
Al final la señora de la limpieza me dejó salir con su tarjeta por qué nadie atendía al timbre de las máquinas.

Al fin libre, ya puedo emprender el camino hacia Nava de Ordunte, así que sigo las flechas a buen ritmo.
Al cabo de un rato paro un momento para revisar la tirita de la zapatilla porque me está rozando, y no quiero que me haga mucha herida, así que reviso la tirita, bebo agua y de paso relleno la botella en una fuente y sigo camino dirección Zalla por la carretera.

Al cabo un rato el camino se desvía y me mete por un bidegorri por el que voy atravesando el río. He atravesado el río Cadagua siete veces por lo menos y lo conozco bien.
Sigo a las flechas y en un rato entro en Balmaseda. Me dirijo después de hacerle una foto a la iglesia, derechito a un bar donde la tarde anterior me tomé una 1906 y muy formal a comerme un pincho de tortilla y otra 1906, hago una foto de rigor al pincho y a la cerveza tranquilamente, y salgo de estampida atravesando Balmaseda ya dirección a Nava.

Sigo por carreteras, caminos y bidegorris, y me empiezan a doler los pies de la fascitis plantar, así que me siento un ratito para descansarlos, y llamar al albergue para decirles que voy, el caso es que no consigo hablar con ellos y sigo camino hasta Nava de Ordunte.

Una vez en el pueblo me voy al albergue y empieza a llover, el hospitalero no estaba, le llamo a la puerta de la casa, la mujer no oyó el timbre, así que voy a ver si encuentro donde comer.

Casualidad el bar cerrado, y otro que hay más arriba también, y está jarreando. Me vuelvo para el albergue y la mujer no sale al llamar a la puerta.
Como escampa un poco, me siento debajo de un árbol y como un poco de lo que llevo en la mochila y vuelvo a tocar en la puerta y no me oye.

Miro hacia el albergue y veo que hay una puerta, pruebo a ver si por casualidad está abierta, y sí está abierta, así que entro, me aposento, pongo el saco en la cama, y me tumbo un rato a descansar,

no sin antes lavar la ropa y ponerla a secar después de pasarla por una maquina centrifugadora que tienen.

Me duermo y me llaman de la mutua que un teléfono que no funciona a ver qué pasa, así que me fastidiaron la siesta.
Más tarde me llama Bego, mi mujer, y casualidad viene la mujer del albergue que ha visto la puerta abierta a ver quién había venido.
Me enseña todo, le doy el donativo y tras charlar un rato del camino se va a sus labores y yo a lo mío.
Luego viene el marido, el hospitalero, me registra y me explica parte del camino, y de cómo funciona todo, también me trae un cacho de pan para cenar.

Ceno con lo que llevo de picoteo queso chorizo y jamón y después de recoger a hacer la crónica esta y a la cama que las 6 dan enseguida.

El albergue se llama el Camino de las Estrellas y es porque tienen pintado en el techo la galaxia y cuando se apaga la luz se ve un camino de estrellas hacia la salida.