Puente Almuhey Cistierna
28 de septiembre de 2023 12ª etapa de este Camino Olvidado, La montaña por testigo, cómo lo llaman algunos. 24,340km según mi GPS.
Hoy me hago el remolón y me levanto a las 6:30 para salir más tarde. Desayuno los polvos proteínicos que llevo, con un sobao que había en el albergue, algunas pastas de las que trajo Sonia amablemente ayer y un flan que compre la noche anterior.
Recojo la mochila toda y friego los utensilios. En ese momento se levantan la pareja de Bilbao Jesús y pilar y tras un intercambio de impresiones sobre las etapas, les saludo saliendo para el amanecer. Cojo buen ritmo hoy son 21km según la guía del camino olvidado pero hay algo de montaña.
El camino es llevadero, bien señalizado y no tengo que mirar el GPS para nada.
Al cabo de un rato llego a una laguna que se llama Lagunas de San Martín muy bonitas con un reflejo en el agua al que le hice varias fotos.
Sigo andando por pistas de tractores y algún tramo de carretera y llego a Otero de Valdetuéjar 8,27km recorridos.
Sigo por los caminos y de repente veo el Santuario de la Virgen de la Velilla que está a 10,20 km y son las 10 diez de la mañana. Paro para verlo y hacerle algunas fotos. es un edificio muy bonito pero esta cerrado y no podre verlo por dentro.
A partir de ese santuario el camino se pone más serio y empiezo a subir la montaña con bastante trabajo debido a que mis bronquios débiles de nacimiento y luego de enfermedad no me permiten dar mucha caña. Para las 10,47 estoy a 1327 metros de altura Las Vallejas .
A partir de hay me tiro varios km bajando y luego otra subida por una senda estrecha de monte, eso sí, bien señalizada, por la cual voy varios km haciendo fotos a los paisajes agrestes de las montañas.
En un cruce de sendas veo un cartel que dice que hay un mirador a 300 metros, bueno según mi GPS fueron 450 pero bueno me meto por hay para hacer foto del mirador. Cuando llegó veo que hay una peña para subir y me dijo que no me subo y hago una foto de Cistierna desde arriba.
Seguido vuelta a buscar el camino y tras otra subida , comienza ya la bajada a Cistierna. Por el camino me encuentro una fuente y repongo agua además de comerme unos frutos secos. Son las 12 y pico y ya es hora de meter algo al estomago.
Sigo bajando y al de un rato más o menos las 13:30 entro en Cistierna.
Voy hacia el centro y paso por la plaza de abastos, además hay furgonetas y puestos, como si hubiera mercadillo. Me puso los dientes largos los chorizos quesos y cecinas, pero no se le puede meter más peso a la mochila.
Llegó a la calle principal buscando un bar donde comer y de golpe me encuentro con el Hostal Moderno que es donde voy a dormir.
Delante de la puerta del hostal hay un cartel que pone la palabra mágica.
Menú del día 12€ Cocido leones entre otras cosas. Pues ya está, cama y comida, justo lo que necesito.
Una chica muy simpática y muy agradable que por su voz era con la que había hablado por tlf me atiende me registra me da la habitación y a comer derecho.
Cocido leones. Sopa, garbanzos, verduras, y tropiezos – costilla, chorizo, morcilla tocino con veta y tocino blanco.
Me pongo a comer y se agolpan de pronto todos mis sentidos con los sabores de mi niñez. En Ciñera el pueblo donde yo nací, había un hombre que trabajaba en el campo de fútbol en el que trabajaba mi padre que comía eso también. Al final cogía el tocino, el chorizo, y la morcilla, y le revolvía todo ello con el pan. Nosotros lo llamamos el remoje del tío Rufo porque el creo que se llamaba asi.
Pues yo hoy lo he hecho y de golpe todas mis vivencias de la niñez se han agolpado en mi cabeza y casi me hacen llorar. Se me han salido algunas lágrimas de emoción al reconocer esos sabores, la niñez y el pan de hogaza. Toda una experiencia.
Al terminar de comer pague el hospedaje y la comida y me fui a la habitación. Ducha, lavado de ropa, tendida por la habitación y siesta. Para las 3:30 estaba en la cama. Me he levantado a las 6 lo que no he hecho en todo el camino.
He salido a comprar algo de fruta para cenar y luego una cervecita 1906 en una terraza. Me ha sacado dos tapas la chica, todo un lujo.
Según estoy tomando la cerveza me llama Sonia hospitalera de Puente Almuhey. Está en Cistierna para hacer un recado y quedamos para tomar un café.
Esta mujer es única no ha hecho ningún camino pero lo sabe casi todo del camino. Servicial, amable, simpática, y muy conocida en el camino olvidado a pesar de ser bastante más joven que la mayoría de los peregrinos parece nuestra madre en el trato. Grande, grande, Sonia toda una institución en este camino, desde aquí gracias por todo.
Tras una charla sobre caminos y sobre todo del olvidado se marcha para su casa no sin dejar una foto de selfies de los dos para recuerdo.
Yo me vengo al hostal a cenar algo de lo que tengo y a hacer la crónica esta, y dormir, que mañana hay otra etapa, otro camino, otro lugar, otra montaña, y otra experiencia.